: : La perdida de la memoria

El escritor italiano Umberto Eco considera que Internet es la causa por la que los europeos cada vez tienen menos conocimientos sobre la historia.
"La pérdida en los conocimientos históricos, una enfermedad típica en Estados Unidos, se está extendiendo por desgracia cada vez más también entre los jóvenes europeos". El literato afirmó además que el "reino de Internet" contribuye a acelerar la pérdida de la perspectiva histórica al difundir "una masa de informaciones de menor importancia".
"Un exceso de información puede ser tan peligroso como una carencia", añadió, considerando que Estados Unidos podría perder debido a ello incluso su memoria colectiva.

La memoria colectiva
De acuerdo con ciertos textos, es posible definir memoria colectiva como una reconstrucción del pasado que vincula cierto acontecimiento recordado con deseos, inclinaciones y temores del presente, es decir, con la ideología.
Por décadas se ha entendido la noción de ideología como un sistema de creencias, valores y costumbres de una comunidad. Algo del sentido común que presenta temas opuestos como una contradicción, a lo que podemos añadir que las personas utilizan la ideología para pensar y discutir sobre el mundo social y, por su parte, la ideología determina a su vez la naturaleza de tales argumentos y la forma retórica que adquieren.
El proceso de recuerdo social se forma en el ámbito pragmático, en las instancias comunicativas de la vida cotidiana. Es allí en donde surgen visiones contradictorias de la historia y se expresan en discusiones a partir del uso de la ideología. Esta determina el origen de esas visiones opuestas, cómo se van a constituir retóricamente, así como va a determinar el significado que los sujetos le atribuyen al pasado.
Memoria, pensamiento e ideología van de la mano. Se cruzan de allá para acá y viceversa. Van y vienen pero al final siempre se encuentran.

La idea, objeto del pensamiento
Puesto que todo hombre es consciente para sí mismo de que piensa, y siendo aquello en que su mente se ocupa, mientras está pensando, las ideas que están allí. No cabe ninguna duda de que los hombres tienen en su mente varias ideas, tales como las expresadas por las palabras blancura, dureza, dulzura, pensar, moción, hombre, etc. Si lo que dice Eco es verdad, que Dios nos salve. La realidad del conocimiento, el entendimiento de las circunstancias en que hemos crecido, el ámbito de la lógica asociada a la memoria… uuf, todo eso esta en serio peligro, lo mismo que las ideas.

Reescribiendo la historia
Podemos decir entonces que el pasado "nace" de la discusión de posturas contrarias y por esto mismo la verdad del pasado podría ser puesto en tela de juicio Las ideologías intervienen en la reconstrucción del pasado porque es indispensable para una sociedad el poseer una conciencia histórica, ésta no se relaciona con el simple recuerdo de hechos históricos como pasaron realmente, sino que siempre implican una lectura del pasado, y es en esa lectura donde se juega la ideología.
Hay muchos ejemplos en la historia de tendencias a reconstruir la memoria de una manera distorsionada. Para los grupos armados por ejemplo, la minimización del daño, la omisión selectiva de determinados hechos o la insensibilización frente al dolor de otros puede actuar como justificación de sus acciones. En el caso de la violencia del Estado, la distorsión de la memoria utiliza frecuentemente mecanismos como el silencio, culpabilizar a las víctimas o atribuirlo a las circunstancias.
Todo eso pone en riesgo grave los procesos de reconstrucción. El impacto en el futuro puede verse, por ejemplo, en la actual tendencia en América Latina a la vuelta al poder de conocidos represores, el aumento de movimientos de extrema derecha o del racismo en Europa.

La memoria del futuro
Nuestra América esta repleta de interpretaciones de la realidad. Algunas más vanguardistas, otras más retrogradas. Algunas más románticas y otras más violentas. La realidad siempre tendrá lecturas únicas y personales. Lo que nos queda es aprender a desarrollar la tolerancia que nos permita convivir armónicamente incluso al lado de alguien que perciba una realidad distinta de la nuestra para que la historia no se pierda en el Internet, sino que viva a pesar de él.
Estoy de acuerdo de que el Internet esta saturado de información de dudosa calidad, pero siento que es necesario. Hay personas, grupos, pueblos, etc., quienes necesitan un espacio para ser. El trabajo esta en las familias por sobre las instituciones. Somos nosotros quienes debemos enseñar a nuestros hijos a ser selectivos con lo que leen asimismo con lo que escuchan, debemos estar cerca para enseñarles. La libertad de expresión debe ser entendida y respetada, ya que las dictaduras de opinión tampoco deberían de ser aceptadas.