: : La fuerza interior

El frio de Miami me tiene loco, claro que no es nada comparado con los menos cincuenta grados que se registraron en gran parte del medio oeste. Sin embargo me siguen amenazando con que las temperaturas bajarán más aun. Esta mañana estaban anunciando nieve cerca del lago Okeechobee. Horror. Seguimos batiendo records como locos. Espero que con estas descontroladas temperaturas no se me congelen las ideas. Mi querida amiga Carolina se alegraba de estar en Inglaterra y no en Oslo. A pesar del frio, yo también me alegro de estar acá y no allá. Cosas de la vida. Hay quienes dicen que no siempre se les puede dar en el gusto a todos. El frio se pasa un poco abrigándose más, hay cosas que no obstante requieren de un poco más de trabajo para superarlas.

Ese es el caso de un señor de apellido González, quien se encontraba descontento con el desempeño del alcalde de Miami Carlos Alvarez. Tanto fue su malestar que se puso en campaña y en pocas semanas logró reunir más de veinticuatro mil firmas para pedir la destitución del cuestionado edil. Este hombre de sesenta y tres años hizo lo correcto. No se quedó de brazos cruzados esperando que alguna otra persona tomara la iniciativa. Se paró y actuó. A poco andar, sus ideas se cruzaron con más personas de igual sentir. Una maravilla. Algún día veremos su historia en HBO o Lifetime. Puede que hasta Disney se interese en llevarla a la pantalla grande, siempre y cuando lo puedan hacer en 3D.

Como si fuera poco, esta mañana me encontré con la noticia de que algunos sindicatos han decidido entregar su apoyo a este Quijote de Coral Gables ya que dicen compartir plenamente su sentir. Estos sindicalistas señalan estar molestos por los despidos en el condado, los recortes de salarios de la mayoría de los empleados y los aumentos de sueldo para el equipo ejecutivo de Alvarez. Si bien es cierto no pertenezco a ninguno de estos sindicatos, comparto plenamente su sentir, ya que la sinvergüencería de esta persona por suerte no pasó inadvertida.

La reacción del señor González merece ser tomada en consideración, ya que la mayoría de las personas nos pasamos la vida quejándonos de esto y de aquello sin hacer mucho por que las cosas cambien. Don Lázaro, ya que ese es su nombre de pila, es un gran ejemplo para toda la comunidad que silente ha permitido que estos criminales de cuello y corbata hagan y deshagan en las arcas fiscales. Con contratos brujos y tratos de índole gansteril. Miami Vice no terminó cuando mandaron a Don Johnson a la casa, lamentablemente se ha mantenido en el tiempo detrás de las puertas de la alcaldía. ¿Nadie ha notado la cantidad de edificios vacios que se construyeron en el downtown?

La verdad es que pasamos la mitad de nuestras vidas lánguidamente y la otra mitad la dormimos con tranquilidad, ya sea en nuestras camas o en nuestros trabajos. Dormimos más de la cuenta. Nos lo pasamos soñando más tiempo del recetado por los doctores. Dicen que soñar no cuesta nada, y puede que sea cierto, sin embargo no nos la podemos pasar en los brazos de Morfeo todo el tiempo.

Siempre me he considerado como una persona de acción, sin embargo debo reconocer que con el tiempo me he ido poniendo demasiado cómodo para mis cosas. Me he ido convirtiendo de a poco en uno de esos entes a los que acostumbro criticar. Me miro al espejo y siento que la persona que veo no es la que quiero ver. En alguna parte del camino me senté a descansar y no me volví a poner de pie. Triste pero cierto. No es fácil de reconocer pero es la santa y pura verdad. Me duele pero debo reconocerlo públicamente para poder comenzar con el proceso de reivindicación. Por eso, cuando leí de don Lázaro me sentí positivamente inspirado. Espero que no sea una anémica inspiración como la de bajar de peso del año pasado que al final se quedó a medio camino. Espero que esta iluminación me dure más.

No hay comentarios.: